Roguemos al Señor - últimas reflexiones

Aldila - Oficial

jueves, 5 de marzo de 2009

Reflexión: Mt 7,7-12


Nuevamente el Señor nos recuerda que no hay otra forma de llegar a Dios que a través de nuestros hermanos. Si, es verdad que nos invita a pedir, a buscar, a llamar… “Porque todo el que pide recibe; el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá.”, pero agrega, no por casualidad, ni por decir algo, sino más bien porque no podemos esperar recibir si no somos capaces de dar y porque la medida de lo que recibiremos será aquella misma de lo que seamos capaces de dar. Por ello agrega, decía: “Por tanto, todo cuanto queráis que os hagan los hombres, hacédselo también vosotros a ellos; porque ésta es la Ley y los Profetas”.

Es decir que el Señor nos dará lo que pidamos, del mismo modo en que nosotros sabemos dar cosas buenas a nuestros hijos. Dicho de otro modo: ¿Si no somos capaces de dar cosas buenas, ni aun a nuestros hijos, si no somos capaces de dar nada a nuestros hermanos, qué podemos esperar? Mejor aún: ¿Qué debemos esperar?

El Señor es justo. Cosecharemos lo que sembramos. Tanto das, tanto recibes. Si la cosecha es abundante, será seguramente porque has sido generoso. Pero no debemos dar pensando en la recompensa, ella se nos dará por añadidura…El Señor nos invita como siempre a amar, a dar, a poner primero y por delante a nuestro prójimo, a nuestros hermanos, porque el que quiera salvar su vida la perderá, en cambio el que la pierda por uno de estos pequeños, la ganará. Así de simple.

Se trata, como siempre, de un cambio de actitud. De una revolución mental. De un aprender a pensar de otro modo. No del modo más popular entre nosotros, no del modo egoísta que es tan popular entre nosotros los hombres, como la cosa más natural y a veces engañosa, no. Se trata de pensar y vivir como Cristo, nuestro Señor nos enseñó.

Oremos:

Te pedimos Señor que nos des un corazón generoso, siempre dispuesto, siempre atento a los demás. Que aprendamos a dar, antes que a pedir o mucho menos exigir.

Que no nos aferremos a las cosas materiales, antes bien, que estemos dispuestos a desprendernos de ellas a la primera, sin consideraciones, sin engaños, ni rebuscados pretextos.

Aparta de nosotros esta forma egoísta de obrar, que nos brota con tanta naturalidad, como si tuviera que ser así. Saca de nosotros tantos malos hábitos, tanta envidia, tanto orgullo y vanidad. Haznos humildes y fieles, siempre dispuestos a servirte.


Roguemos al Señor…

Te lo pedimos Señor.
(Añade tus oraciones por las intenciones que desees, para que todos los que pasemos por aquí tengamos oportunidad de unirnos a tus plegarias)

No hay comentarios:

Reflexiones de HOY