Roguemos al Señor - últimas reflexiones

Aldila - Oficial

martes, 10 de marzo de 2009

Reflexión: Mt 23,1-12


Jesús nos llama a la reflexión respecto a la actitud que debemos mantener siempre y mucho más aún cuando llegamos a ocupar lugares importantes en nuestra comunidad, ya sea como dirigentes espirituales (con mayor razón) como autoridades de cualquier tipo.

¿Cuál es el problema con los escribas y fariseos? Que están sentados en la cátedra de Moisés, se encuentran en la más alta posición…Entonces hay que hacer lo que dicen, no nos queda otra, pues sino sufriremos las consecuencias. Ellos tienen el poder para ordenar y disponer. Así, será muy difícil que dejemos de hacer lo que disponen. El Señor aquí lo reconoce. Sin embargo nos pide que no los imitemos, porque son abusivos, incomprensivos.

¡Qué fácil es desde las jefaturas echar sobre los hombros de lo subordinados cargas que jamás hemos llevado, ni seríamos capaces de llevar! Arrimarle todo al que más aguanta, al que más asimila. Total, mientras no proteste, sigamos dándole, sin más reconocimiento que la misma paga, sin consideración, recordándole lo que son sus deberes, si en algún momento levanta la cara o trata de insinuar el menor gesto de incomodidad, de cansancio, de agotamiento, de desaliento…

Se prioriza todo aquello que puede aumentar los ingresos, las utilidades…Aún se invierte en nuevos equipos, nuevos materiales, eventos de marketing, campañas publicitarias, promoción, regalos, etc, sin embargo la cifra de sueldos y salarios permanece intacta, es más, se fusionan puestos, se reduce el personal…En el último que se piensa es en el ser humano que lleva sobre sus espaldas la empresa, el negocio, la institución. ¿Cómo se las arregla? Es su problema, mientras esté al día siguiente nuevamente a las 8 de la mañana, con buen ánimo y dispuesto a asumir todo lo que se disponga hasta la hora que sea necesario, sin sobre tiempos ni beneficios de ningún tipo. ¡Total, la fuerza laboral es tan grande, que como burros de carga, todos son reemplazables!

Por si fuera poco, estos “jefes” se han apoderado también de nuestra religión, participan en las eucaristías, comulgan, ocupan los más importantes lugares e incluso se dan el lujo de predicar, de decir que son cristianos y que sus organizaciones también lo son…

Por eso Jesús nos dice: “no imitéis su conducta, porque dicen y no hacen.” ¿Somos de los que decimos y no hacemos? Y nos recuerda cual debe ser nuestra actitud, nuestro proceder en la vida y especialmente cuando lleguemos a esos puestos: “El mayor entre vosotros será vuestro servidor. Pues el que se ensalce, será humillado; y el que se humille, será ensalzado.” ¿Cuántos lo recordamos?

Más claro, el agua. El que tenga oídos que escuche. No tratemos de interpretar, acomodar y retorcer estas palabras. Apliquémoslas en nuestras vidas.

Oremos:

Danos sabiduría para aplicar tus mandamientos – estos que nos das a conocer en esta lectura- en nuestras vidas.

Que no nos regodeemos en el poder, que no nos envanezcamos; que por el contrario busquemos servir sinceramente, de corazón y con humildad.

Que recordemos siempre que por encima de las instituciones, de las organizaciones o de las empresas, siempre debe estar el hombre. Que todo ha sido creado para el hombre y no al revés.


Roguemos al Señor…

Te lo pedimos Señor.
(Añade tus oraciones por las intenciones que desees, para que todos los que pasemos por aquí tengamos oportunidad de unirnos a tus plegarias)

No hay comentarios:

Reflexiones de HOY